En cada persona de la PUCP que nos inspira, hay un propósito que queremos compartir y celebrar. Cada miembro de nuestra comunidad nos ayuda a crear y llevar conocimiento dentro y fuera de la Universidad.
1. ¿Qué te animó a participar de la Ruta de la Memoria por la COVID-19 y cómo te sentiste siendo parte?
Me animó a participar recordar mi propio duelo cuando perdí a mi abuela durante la pandemia, todos los comentarios como resultado de los estereotipos que hay de cómo debemos y es correcto vivir el duelo, sabía también que no era la única que había perdido a unx familiar, cuando lo conversamos con lxs chicxs de la MD realmente nos conmovió y pensamos que no podía faltar la actividad y conmemoración en la facultad de psicología.
2. ¿Qué te llevas de esta experiencia?
Me llevo lo poderoso y lo bonito de hacer comunidad, de sentir una red de apoyo tan grande que si bien no todxs tenemos las mismas experiencias, compartimos situaciones que de alguna u otra manera nos han afectado en los últimos años. Me llevo también la reflexión que tuvimos en conjunto, que las personas que nos dejan no nos dejan por completo. Definitivamente, después de años sin poder interactuar, ha sido un cierre importante, un cierre reflexivo que nos abraza a quienes tuvimos que hacer duelo como lxs demás nos impusieron.
1. ¿Qué te animó a participar de la Ruta de la Memoria por la COVID-19 y cómo te sentiste siendo parte?
Cuando escuchamos por primera vez, en una reunión en el mes de mayo del 2022, que se estaba pensando en encontrar o crear un lugar, evento o espacio donde se conmemorara el proceso que habíamos vivido como comunidad a partir de la pandemia y sus impactos; Arte y Diseño tenía que estar presente. Esta iniciativa nos convocó a procesar el duelo y celebrar la vida. Ha sido muy valioso para mí y para todas las personas que se involucraron en el gran evento en que se convirtió la Ruta de la Memoria, como espacio para visibilizar las emociones que debimos procesar de manera individual durante la pandemia, y que la Ruta de la Memoria nos permitió vivir en comunidad. Fue como cerrar procesos, curar heridas, que se habían quedado abiertas en nuestro interior.
2. ¿Qué te llevas de esta experiencia?
La capacidad de respuesta de los distintos grupos que conforman la PUCP. Hemos visto involucrarse a docentes, estudiantes y personal administrativo aportando desde sus experiencias personales y vivencias y trabajando de manera comprometida por varios meses para organizar el evento. Me quedo muy gratificada con la resonancia positiva que logramos como comunidad cuando nos alineamos en objetivos y metas comunes que trascienden.
1. ¿Qué te animó a participar de la Ruta de la Memoria por la COVID-19 y cómo te sentiste siendo parte?
Al momento de escuchar la propuesta sentí lo necesario que era abrir un espacio de duelo en nuestra comunidad, y esto me animó a participar. Formar parte de la Ruta de la Memoria me hizo reflexionar sobre el impacto que tuvo la pandemia sobre la comunidad universitaria, el acompañamiento mutuo de la comunidad fue bastante esperanzador y cálido.
2. ¿Qué te llevas de esta experiencia?
Antes de la ruta de la memoria no imaginaba el efecto que tendría pasar el proceso de duelo en comunidad. Me llevo cada desahogo y experiencia vivida y compartida en el campus. Es verdad que cada uno de nosotros pasó por un proceso diferente, pero compartir estas historias fortaleció nuestra unión y nos hizo sentir más que acompañados.
1. ¿Cómo te sentiste siendo parte de la Ruta de la Memoria por la COVID-19?
Me sentí privilegiada de poder ser parte de un proceso en que las diversas unidades de la PUCP se reunieron y planificaron un espacio lleno de detalles y cuidado para recordar nuestras pérdidas ocurridas durante la pandemia. Me sentí acompañada por las estudiantes que trajeron sus presencias, sus poemas y sus voces en el ejercicio de recordar. Me conmovió escuchar sus relatos y ser testigo de su sensibilidad y de lo íntimo de compartir momentos dolorosos.
2. ¿Qué te llevas de esta experiencia?
La ruta de la memoria nos ayudó a compartir nuestros recuerdos y experiencias, a escucharnos, a honrar a nuestros seres queridos y acompañarnos como parte de la comunidad PUCP. Me llevo toda la sensibilidad de nuestras estudiantes que les permitió poder confiar y participar en la ruta de la memoria, y también, me llevo la certeza de lo importante y necesario que es siempre recordar.